Con una extensión de 53.400 hectáreas, el Parque Natural Sierra de Grazalema, forma parte del extremo más occidental de la Cordillera Subbética y está situado entre el noreste de la provincia de Cádiz y el noroeste de la provincia de Málaga. Este macizo kárstico, en el que la aridez del agua conforma numerosas cuevas, desfiladeros y dolinas, constituye una auténtica muralla donde los vientos cargados de humedad procedentes del Océano Atlántico descargan intensas lluvias, siendo la zona con mayor precipitación de la mitad sur peninsular, a pesar de la sequía estival. Asimismo, existe una gran variabilidad pluviométrica en distancias cortas de unos 30kilómetros, pasando de los 900 milímetros anuales en El Bosque (298 metros de altitud), a los 1.200 milímetros anuales en Ubrique (330 metros) o a los 2.200 en Grazalema (812 metros de altitud).
El pinsapar es la formación vegetal más característica y definitoria del espacio y está muy ligada a las variables climáticas propias de la zona, como son la humedad, la temperatura, la radiación o la formación de niebla en altura. Todo ello convierte a esta zona en un sensor ideal para evaluar cómo la variabilidad climática influye en el ecosistema de la zona, lo que ha motivado su elección para el establecimiento de una de las ocho estaciones de observación del proyecto ClimaDat.
Los datos recogidos en todas las estaciones de muestreo serán de libre acceso para toda la comunidad científica, obtenidos en unas instalaciones dinámicas que evolucionarán en instrumentación según los nuevos retos científicos y que estarán abiertas a la colaboración con otros grupos de investigación.
El grueso del instrumental científico se instalará en la población de Villaluenga del Rosario, en la Sierra del Caíllo, mientras que la parte expositiva, desde donde se llevarán a cabo las actividades de divulgación y educación asociadas al proyecto y a los datos recogidos, se situará en el centro de visitantes del municipio de El Bosque.
El proyecto ClimaDat, impulsado por la Obra Social La Caixa durante cinco años, al que el primer año destina dos millones de euros, se desarrollará en diversas fases: la construcción de las estaciones de investigación; el establecimiento de centros de control y difusión en CosmoCaixa Barcelona y Madrid; la calibración, el mantenimiento y la resolución de incidencias en los puntos de observación; la obtención, la elaboración y la distribución de datos; y la realización de actividades educativas y divulgativas en torno al proyecto.
La investigación que se realizará y su estructura de observación se convierten en una iniciativa pionera a nivel europeo. Sólo existe una red similar en Estados Unidos, NEON, la Red de Observación Nacional de Ecología, que recoge datos físicos y biológicos en llanuras, bosques y lagos; una red de monitoreo ecológico que toma el pulso de los sistemas naturales y expresa su estado de salud. La red ClimaDat estudiará las interrelaciones entre los sistemas climáticos y los naturales, proporcionando una imagen climática única del territorio español, que recibe influencias atlánticas, mediterráneas y subtropicales. Todas ellas pueden sufrir cambios que pueden influir sobre el clima de nuestro territorio. Los datos obtenidos son una poderosa herramienta para poder aplicar iniciativas de futuro que mejoren el planeta y, además, podrán ser utilizados para evaluar de manera precisa el balance de gases de efecto invernadero a escala local y regional. Por ello, las estaciones en red ClimaDat se convierten en un sensor ideal para conocer la evolución y el impacto climático, y permitirán anticipar así políticas efectivas de mitigación y adaptación.
Líderes del monitoreo
Ecosistemas terrestres y marinos son los puntos de ubicación de las estaciones climáticas (sites). Parques nacionales, reservas de la biosfera o parques naturales constituyen los emplazamientos ideales para el monitoreo del clima, ya que contienen ecosistemas muy sensibles a cualquier fluctuación, además de ser extremadamente importantes para la conservación de la biodiversidad. Además de en el Parque Natural de Sierra de Grazalema el resto de estaciones se situarán: una más en Andalucía oriental, una en Álava, una en Cataluña, una en las islas Baleares, una en Galicia y una en las islas Canarias.
Información actualizada
Los datos que se vayan obteniendo gracias a estas estaciones situadas en la red de ocho espacios de investigación en zonas protegidas serán mostrados a través de los centros situados en los museos de la ciencia de la Obra Social "la Caixa" CosmoCaixa Barcelona y CosmoCaixa Madrid, y en los propios sites. Asimismo, los datos se podrán consultar libremente a través de internet.
Un compromiso con el medio
Este proyecto, impulsado por la Obra Social La Caixa durante cinco años, al que el primer año destina dos millones de euros, se desarrollará en diversas fases: la construcción de las estaciones de investigación; el establecimiento de centros de control y difusión en Cosmo Caixa Barcelona y Madrid; la calibración, el mantenimiento y la resolución de incidencias en los puntos de observación; la obtención, la elaboración y distribución de datos; así como la realización de actividades educativas y divulgativas en torno al proyecto.
Con esta iniciativa, la Obra Social La Caixa reitera una vez más su compromiso con el medio ambiente, la sociedad y las generaciones futuras.
El conocimiento del clima es una herramienta de gran importancia para poder aplicar iniciativas que mejoren la salud del planeta, así como para diseñar las estrategias de mitigación y adaptación adecuadas ante el cambio climático.