La patronal quiere una denominación de origen Este sector aumentó sus exportaciones hasta en un 30% en los dos últimos años
La industria de la piel facturó 1.754 millones de euros, en 2011, en el contexto nacional. Casi la mitad de ese volumen de venta lo capitaneó la marroquinería de Ubrique, que se ha convertido en una de las principales exportadoras de la provincia gaditana.
De hecho, sus exportaciones han subido un 30% desde hace dos años. Según la propia delegada territorial de Economía de la Junta, Angelines Ortiz, "ocho de cada diez euros" de exportaciones gaditanas vienen de la piel. Este sector base de la economía ubriqueña entiende que el aumento de las exportaciones se debe en parte al auge de la demanda de los productos en los mercados tradicionales y la subida de la demanda de productos de alta gama o de lujo en países emergentes asiáticos que buscan el sello diferenciador.
Con estas credenciales que sitúan a la piel como líder internacional en su sector, la marroquinera persigue conseguir una certificación europea para su producto único como garantía de excelencia y calidad que le permita seguir avanzando en el futuro. Por eso, la patronal Empiel, que agrupa a un centenar de empresas ubriqueñas, ha dado sus primeros pasos en la Unión Europea para demostrar su interés de entrar en una Indicación Geográfica Protegida para sectores y productos no agrícolas europeos y de terceros países. De hecho, una delegación de la patronal encabezada por su presidente, José Pulido, defendió la semana pasada en una audiencia pública en Bruselas la necesidad de crear un reglamento para asegurar una mejor protección de estos productos, que en el caso de Ubrique, da, a día de hoy, trabajo a unas 4.000 personas. Es una cifra que puede subir hasta los 6.000 puestos directos e indirectos en temporadas como la de invierno. Ahora, los empresarios serranos trabajan ya para la organización de una reunión al más alto nivel que se celebrará en Madrid para recabar los apoyos de otros productores europeos para la firma de adhesión de un documento que inste a la UE a agilizar los trámites para la aprobación de esta denominación de origen a la que aspiran. "Creemos que es prioritario que se defienda la marca Ubrique, su prestigio y el conocimiento de una manera de hacer artesana", explica Pulido, que valora como "muy positiva" la primera audiencia pública a la que asistió la patronal ubriqueña la semana pasada en Bruselas para defender esta actividad económica y sus contactos posteriores con eurodiputados. Por eso, los empresarios de la piel piensan que la defensa de esta denominación e indicación geográfica debe ser una acción de Estado. De momento, han recabado los apoyos de la Asociación Española de Fabricantes de la Marroquinería, Asefma, de la propia Junta de Andalucía, que localiza 18 productos susceptibles de esa indicación en la Comunidad Autónoma y el Gobierno central, que está a la espera de debatir una proposición no de ley para este asunto.
Empiel viene trabajando desde 2008 en esta denominación a instancias de la propia Comisión Europea que la incluyó en un primer informe como posible candidata a esta certificación. El sector de la piel baraja como horizonte para su materialización al menos dos años, si el procedimiento no sufre ningún parón.