Izquierda Unida y el movimiento Marea Azul del Sur animan a los ubriqueños a que se opongan a la creación de una empresa mixta para este servicio
Tratan de promover una respuesta ciudadana contra la privatización del servicio de agua. El colectivo Marea Azul del Sur, coordinado por el movimiento contra las privatizaciones de los servicios de agua en Andalucía, ha seguido los pasos de Izquierda Unida Ubrique y se ha opuesto a que el Ayuntamiento cree una empresa mixta para la gestión de este servicio, en la que una empresa privada contará con el 49% de la participación, y por tanto al pliego de condiciones para encontrar a esta empresa.
El colectivo destaca que Ubrique cuenta con «una oportunidad de oro» para, una vez terminado el contrato que le ataba a Aqualia, hacerse cargo del servicio. No obstante, lamentan el proceso que se ha puesto en marcha porque entienden y denuncian que el pliego de condiciones que se ha elaborado «responde a la alianza PP-Aqualia, ya que lo ha realizado, con un coste elevado de 22.000 euros, la consultora que viene haciendo los pliegos donde se hace evidente esta relación». Con ello, desde Marea Azul del Sur destacan que el proceso tiene pinta de ser «un pliego hecho a medida de la empresa saliente». Al respecto destacan que se ven muchas incongruencias, detalles y formas intencionadas que «pueden estar dentro de la ilegalidad, así como datos y cifras, presuntamente manejadas, para evitar a otros ofertantes». Por ello anuncian que ya están elaborando las alegaciones pertinentes y anuncian que si el Gobierno local del PP las rechaza «llegaremos a los tribunales irremisiblemente».
Para la Marea Azul, lo más escandaloso del tema es el «irrisorio» canon de 200.000 euros que establece el Pliego; obras de mejora «por el ridículo valor total de 700.000 euros, en los veinticinco años de adjudicación»; la previsión de subida en los primeros años del 11% anual y la imposición del pago de un millón y medio de euros, como concepto de pago a Aqualia por unas antiguas obras de mejora realizada por esta empresa que «se están financiando con un canon de mejora en los recibos de los vecinos y que no termina hasta el 2022»