Será un aula didáctica conforme a uno de los objetivos impulsados por Diputación y contendrá obras pictóricas y escultóricas dedicadas a las víctimas de la represión
La Diputación Provincial de Cádiz informó hoy de la inauguración del Parque de la Memoria en Benamahoma, en Grazalema, para rendir «tributo social» a las al menos 110 personas fusiladas a partir de julio de 1936 y enterradas en fosas comunes en el cementerio viejo de Benamahoma.
Según explicó la Diputación en un comunicado, los restos son «irrecuperables» a tenor de la descomposición acelerada por la cal viva con la que fueron sepultados los cuerpos. Las víctimas procedían, en su mayor parte, de Benamahoma y Grazalema, si bien también hay vecinos de Villamartín, Prado del Rey, El Bosque, Ubrique, Benaocaz y Villaluenga.
El Parque de la Memoria será un aula didáctica conforme a uno de los objetivos impulsados por la Delegación de Ciudadanía de la Diputación y contiene obras pictóricas y escultóricas dedicadas a las víctimas de la represión, así como zonas ajardinadas y bancos. Diez pinsapos recordarán los orígenes de las personas que yacen en la fosa, procedentes de al menos diez poblaciones de la provincia de Cádiz.
El Ayuntamiento de Grazalema-Benamahoma concibe el nuevo espacio como un contenedor que se irá nutriendo con muestras de muralistas e incluso con creaciones surgidas de la participación ciudadana. En este nuevo espacio convergerán obras de Andrés Montesanto, de José Hinojo y de la Escuela de Arte de Huelva.
Los restos de los vecinos de Bemamahoma que aún permanecían en el cementerio viejo –al margen de las fosas– han sido trasladados al cementerio nuevo, y se han eliminado los matojos que poblaban el lugar.
Finalmente, la Diputación resaltó que con el Parque de la Memoria la población gana un nuevo espacio público «para dignificar el recuerdo de los vecinos de la Sierra de Cádiz que fueron masacrados en la Guerra Civil».