La Unión de Sindicatos de Trabajadores de Andalucía (Ustea) celebra que Alejandro, el niño de Ubrique de ocho años que el curso pasado fue intervenido de un tumor cerebral y que se encontraba «sin escolarizar», ya esté recibiendo clases.
Según han informado fuentes sindicales a Europa Press, tras la denuncia pública que realizó Ustea el pasado martes, en la que señalaba que la Junta de Andalucía tenía al pequeño ubriqueño «abandonado» y «sin escolarizar» al no tramitar su solicitud para acogerse al Programa de Acompañamiento (PROA) -gracias al cual el menor recibe en su propio domicilio la visita de un maestro que tutela su aprendizaje-, «al día siguiente ya se dio el visto bueno para activar dicho programa». De esta manera y «tras perder dos meses lectivos», Alejandro recibirá clases en su casa.